Última de carta de Ann Elizabeth Moore

(The following is a translation of Annie Moore’s Last Letter into Spanish, prepared by Luis Ángel González Rocha. The editors of this website are grateful for his assistance in creating this document.)

Tengo 24 años en estos momentos y no espero vivir al finalizar este escrito.

Pensé que debería de, al menos, hacer un intento para dar a conocer al mundo lo que Jim Jones y el Templo del Pueblo es- o fue- en su magnitud.

Parece ser que a algunas personas y tal vez a la mayoría, les gustaría destruir lo mejor que le ha pasado a cerca de 1,200 de nosotros quienes decidimos seguir a Jim Jones.

En este punto me encuentro muy enojada contra el mundo y no sé por qué estoy escribiendo esto. Quien lo encuentre pensará que estoy loca o creerá en la alambrada que NO existe en Jonestown.

Parece ser que todo lo bueno que ocurre en este mundo se encuentra bajo constante ataque. Cuando escribo esto puedo pensar que algún malsano fascista lo encuentre y decida tirarlo a la basura antes de que alguien tenga la oportunidad de escuchar la verdad-la que estoy escribiendo.

¿Por dónde puedo comenzar?- JONESTOWN- la más pacífica y amada comunidad que jamás existió-JIM JONES- quien hizo posible este paraíso- muy al contrario de las mentiras dichas sobre Jim Jones siendo un hambriento sádico, un malvado quien se creyó a si mismo Dios y todas esas cosas.

Quiero que tú, quien lee esto, sepas que Jim Jones fue la más honesta, amorosa y protectora persona que he conocido. Su amor por los animales- cada criatura, serpientes venenosas, tarántulas. Ninguna de ellas le mordió porque él era una persona muy amable. Él sabía lo malvado que el mundo era y tomó a su cuidado a cada uno de los animales

Su amor por los humanos fue insuperable y fue a muchos a quienes dio su amor y confianza, y estos se alejaron de él y le escupieron en la cara. Teresa Buford, Debbie Blakey- ambas querían obtener sexo pero él estaba muy enfermo como para poder darlo- ¿Por qué habría tenido que darles sexo?- y Tim y Grace Stoen también, incluyéndolos. Debí saber.

He pasado los últimos meses cuidando de la salud de Jim. Sin embargo, ha sido difícil cuidar de cualquier cosa de él. Siempre hacía las cosas por sí mismo.

Su odio por el racismo, sexismo, elitismo y principalmente el clasismo fue lo que le motivó a hacer un nuevo mundo para las personas – un paraíso en la jungla. Los niños lo amaron. De igual manera todos lo hicieron.

No hubo una fea y malvada policía esperando para abatir nuestras cabezas, no más miradas racistas por parte de blancos y otras personas creyéndose superiores. Nadie fue ridiculizado por su apariencia. Algo que ninguno de nosotros controlaba.

La maldad y la humillación no eran permitidas. Tal vez fue por esto que todas las mentiras comenzaron- además del hecho de que no se le permitía a nadie vivir en mejor posición. En los Estados Unidos se permite el clasismo, siendo este el problema y no las ramas del poder negro, poder de la mujer, poder indio y poder gay.

Jim Jones nos mostró todo esto- que podíamos vivir juntos con nuestras diferencias, que somos lo mismo- seres humanos. Por suerte, tuvimos mejor fortuna que los hambrientos bebés de Etiopía y los hambrientos bebés de los Estados Unidos.

Que hermosos lugar era este. Los niños amaban la jungla, aprendieron acerca de los animales y plantas. No había carros que pudiesen pasar por encima de ellos; ningún abusador de niños que pudiese atacarlos; nadie quien los pudiese dañar. Fueron los más libres, los más inteligentes niños que he conocido.

Los ancianos tenían dignidad. Tuvieron todo lo que querían – una parcela de tierra para hacer un jardín. Los ancianos eran tratados con respeto- algo que jamás tuvieron en los Estados Unidos. Raras veces enfermaban, y cuando lo estaban, se les daba el mejor cuidado médico.”

[cambia el color de la tinta de azul a negro]

“¡Hemos muerto pues ustedes no nos hubiesen permitido vivir en paz!” [firmado] “Annie Moore”